Tenemos la suerte de vivir en una época y un contexto en el que no solemos vivir con la sensación de incertidumbre, o inestabilidad para la
seguridad de la propia vida y la salud, tanto física como mental. Por lo menos no de una forma continuada. Y sin embargo, de repente… la
situación puede cambiar y podemos empezar a encontrarnos con noticias, o vivencias que hacen que esa sensación de seguridad se tambalee.